"Presencias" Invisibles en el Aeropuerto

Estoy cerca ya de alcanzar mi foto 500 en jetphotos.net pero tengo el serio problema de que pienso y vuelvo a pensar en cuál va a ser la elegida para ocupar tan importante posición sin poder resolverlo hasta ahora. Las perspectivas de lograr una foto bonita en el aeropuerto en estos días son pocas por la mala calidad de la luz y el clima. Ya dejamos atrás la temporada alta de verano y el tráfico se pone cada vez más flojo. Terminé mi oleada personal de fotos de Fidae y no es mi idea subir por separado una rueda, un frontal, un ala y después toda la integridad física de un mismo avión con fines acumulativos así que la tengo complicada.

Me sugiere un buen amigo que sea una foto del precioso", haciendo alusión al B772 de AF y que es uno de mis tráficos favoritos; pero el problema con ello, es que en esta época del año llega y se va con mala luz. También pienso que podría ser un carguero como un B747, pero la verdad es que este tipo de aviones son demasiado esquivos como ya les he contado antes (ver cargolux) así que es difícil. Igual no he visto uno desde hace semanas ya y no espero verlo pronto tampoco.

No lo vislumbro en un primer momento pero la solución a mis preocupaciones me la da mi amigo Alfaromeo o Alfredo. Me invita para una visita nocturna al aeropuerto y ni corto ni perezoso acepto porque ir al aeropuerto de noche es muy entretenido. Parto entonces en la noche a visitarlo a su trabajo y antes de salir de casa empiezan los problemas para mi. Al momento de reunir las herramientas "de trabajo", comienzo buscando el trípode y al tomarlo se desarma. La pieza donde se fija la cámara y que se une a una rotula, vuela por los aires y entro en pánico. Sin trípode no es mucho lo que puedo hacer en fotografía nocturna así que pierdo más de una hora tratando de parcharlo y yendo después a Providencia a comprar uno y no hay. Increíble... No Hay. La única opción es la tienda Nikon y el precio es abusivo por no decir sinverguenza, por lo que al final consigo uno prestado.

Me voy al aeropuerto y noto que en el enredo por el trípode maldito olvidé cargar bencina por lo que voy justo para ir y volver. Llego al aeropuerto y primero tomo algunas fotos desde afuera hacia el sector de puentes donde veo un A320 y dos A340 de Lan. Este lugar es complicado. Las luces apuntan hacia mi y además hay un guardia de seguridad en las cercanías que tan pronto ve un auto estacionado donde ahora está el mío llama a los carabineros.



Luego entro y me encuentro con mi amigo y nos vamos de paseo por el interior sin pérdida de tiempo. A partir de ese momento pasamos a ser "presencias" inmateriales e invisibles que se van a ir a recorrer el aeropuerto… de noche.

La primera parada va a ser en el sector de carga y cuando vamos camino hacia allá mi amigo me dice "hay una sorpresa en la plataforma de carga". "Un carguero" pienso yo (para que vean que intuitivo soy) y automáticamente pienso en la foto 500 que hasta ahora había olvidado. Esta podría ser la oportunidad de capturarla.

Para llegar al sector de carga las presencias inmateriales e invisibles deben pasar por debajo de los puentes 15 al 24 y virar a la derecha por una especie de túnel que pasa por debajo del terminal de pasajeros nacional; al quedar con vista despejada, veo estacionado en la plataforma de carga un MD-11F perteneciente a "Gemini Air Cargo" al que nunca antes he visto y que siempre quise fotografiar. Espectacular!!!!. La oportunidad no puede ser más perfecta y cuando vamos a situarnos junto al avión las presencias invisibles dueñas de casa son convocadas hacia el otro sector del terminal, la parte internacional, junto a los puentes 10 al 14. Demonios!!!. Me dan 30 segundos para tomar la foto 500 y en ese momento descubro mi segundo error fatal de la noche consecuencia de la confusión tripoidal: Olvidé traer el lente corto (28-80mm) y sólo tengo el 55-200mm. En consecuencia, pierdo valiosos segundos en alejarme del avión para que entre completo en la foto. Después de todo, un MD-11 es un gigante. Disparo apenas tres veces probando seteos diferentes y partimos volando hacia el otro sector. Adiós MD-11.


Algunos días después se convierte en mi foto número 500 en la base de jetphotos . La puedes ver AQUI.

En ese momento sin embargo, ruego que la foto esté enfocada. El consuelo es que calculo que aún le queda media hora al menos para irse así que podemos volver a verlo más de cerca e incluso, mis amigos dicen que como presencias invisibles hasta podríamos subir al avión. Y yo sin lente corto...

Llega todo el grupo al otro sector raudos y mientras "estamos" cumpliendo importantes funciones, me entretengo mirando y fotografiando el proceso de carga de combustible en un Gol y me explican mis amigos todo lo que conlleva dicho proceso. No me acuerdo del MD-11 para nada ni estoy preocupado de si partirá pronto o no.

Si se fijan, este señor mientras carga combustible sostiene una especie de gatillo en la mano izquierda. Para el que no lo sabe, ese dispositivo lo mantiene apretado y en caso de que se desmaye por ejemplo, o por cualquier otra circunstancia lo suelte, se interrumpe automáticamente el flujo de combustible. Este detalle no lo conocía personalmente.


Una vez que podemos volver al sector de carga, como presencias invisibles que somos, nos detenemos bajo el puente 15 pues acaba de llegar el 767-200 de Aeromexico, avión que no he tenido la oportunidad de fotografiar desde que en marzo o abril del año pasado cambió su frecuencia diurna por una nocturna lo cual nos privó de verlo.

Lo vemos como se acerca al puente pero el problema es que aquí no me atrevo a instalar el trípode y como el avión está en movimiento, cualquier exposición prolongada arruina las fotos por lo que decido usar el modo "escena nocturna". Segundo problema... a medida que el avión se me acerca se nota el efecto de estar usando un lente que es "para lejos", así que cuando tengo al avión al frente de mi y casi detenido... no alcanza a entrar entero en la foto. Uno de los motores queda cortado y será mi falta de experiencia en este tipo de fotos quizás, pero no hago la pausa para enfocar con calma.


Pero algo sale en todo caso.


Ya con la luz de la cabina encendida podemos a ver a los pilotos mexicanos en los trámites propios de esta etapa de su vuelo.



Ha pasado casi media hora desde que fotografié al MD y volvemos al sector de carga y a nuestra izquierda podemos ver varios Lan's en los puentes. Había calculado que el Gemini no se iría antes de media hora y así es: Justo 31 minutos después que lo vi al llegar, veo que el MD ya está listo para rodar y no hay tiempo siquiera para poner el trípode ni nada porque ya está rodando. Las fotos a continuación es lo que mejor obtengo.


Pero como no todo es tomar fotos, y recordando que somos invisibles, partimos a ubicarnos al cerca de la pista a ver la carrera y despegue del Gemini. No se puede describir bien lo que se siente estar tan cerca de un gigante lanzado a toda velocidad y en medio de la oscuridad. Increíble.


Pasa raudo junto a nosotros mientras la tierra tiembla y lo vemos como sigue y sigue y no rota... y sigue, y no rota y cuando según yo casi no le queda pista ya, lo vemos que por fin se eleva. Ese es un despegue de un avión completamente cargado. Se acaba de engullir más de 3.500 metros de pista.

Volvemos hacia el sector de los remotos y se ve que están llegando algunos repuestos para los "Baby-bus" como pueden ver. Aquí abajo debe haber un flamante motor PW-6000 (un cacho parece).



También hay algunos aviones pernoctando y uno de los problemas para tomarles fotos es que tienen una escalera al lado lo cual literalmente mata una foto frontal del avión ("Obstructing Object" en jerga de screener). Ese es el caso de este Sky y con el que sucede una anécdota curiosa que paso a contar: Cuando me ubico frente a él con el trípode (veo que hay movimiento en la cabina), me ubico con calma y tomándome el tiempo de que esté todo en orden para la foto. Cuando estoy a punto de disparar, quien quiera que haya sido el que estaba dentro de la cabina, prende las luces de las alas y yo quedo como conejo sorprendido al ser alumbrado con una linterna. Lo miro perplejo y le hago un gesto como de incomprensión con los brazos, pero en broma... se apagan las luces y puedo tomar la foto. Muchas gracias. Ahora si ya tengo lo que quería.


Aquí se nota la falta de experiencia pues me empeciné con un frontal cuando pude tomar la foto desde un ángulo lateral...

En este momento está punto de despegar uno de los A343 de Lan por lo que repetimos el viaje a situarnos cerca de la pista para verlo despegar. Por desgracia no tengo fotos de ese momento porque llegamos con el tiempo justo para verlo.

Volvemos por el sector de los remotos y en una muy buena ubicación está durmiendo como niño bueno el B737 de Copa que iniciará su vuelo al mediodía siguiente, y como ya son casi las 11 de la noche, este sector está muy tranquilo por lo que dispongo de cierta calma para fotografiarlo.



Un detalle significativo. En este sector donde hoy están los remotos correspondía a la loza frontal del antiguo terminal y que hoy ya no existe. Mi amigo me cuenta que por dónde estamos ahora hay una placa conmemorativa de la visita de El Papa Juan Pablo II en 1987, y que marca el lugar preciso donde besó tierra chilena.

Caminamos dando vuelta y mirando hacia el suelo afanados hasta que la descubrimos. Yo no sabía de la existencia de esta placa y supongo que muchos otros tampoco lo sabrán así que les dejo una foto para que la conozcan. Lamento que el flash haya conspirado contra una buena visibilidad pero se puede leer lo que está grabado en ella.


Comenzamos a volver y vemos taxear a otro A343 de Lan. Este es "el Canguro" que va a Auckland en un largo vuelo oceánico. Le tomo una foto simbólica pues como dije está en movimiento y no es mucho lo que se puede lograr así. La última mirada es hacia el sector de Lan donde muchos avioncitos reposan ya a esta hora y otros como este B767 es preparado para un próximo vuelo quizás a primera hora de la mañana.



Fin del paseo. Nos tomamos un café que nos rematerializa y dejamos de ser presencias invisibles. A esta hora comienza a hacer mucho frío en el aeropuerto y si bien el movimiento ha sido un tanto flojo, pues llegué después que se habían ido los American y el Delta entre otros, lo he pasado muy bien. Gracias a mis amigos y a Alfredo especialmente, nadie me vino a sacar en esta ocasión (Ver nota del IL-96 de Cubana) y hemos estado más de una hora recorriendo de un lado para otro. Me voy feliz a casa pero con un ojo clavado en el indicador de bencina pues tengo lo justo para recorrer los 36 kilómetros que me separan de mi casa. Curiosamente no tengo una sola bencinera a mano en todo el camino. Cuando pase a cargar le exigiré a el bombero que tenga a mano el mismo dispositivo que vi en el Gol.

saludos a todos. Espero traerles pronto una nueva historia. En mi trabajo tuvieron la idea de ponerme a dirigir un área muy interesante pero también exigente por lo que mi antigua rutina se vio completamente alterada en cuanto a disponibilidades de tiempo libre. No he dejado de ir al aeropuerto los fines de semana en todo caso y sobre eso espero contarles próximamente.


Gatto.