martes, agosto 26, 2008

El PT-MUA

Hace más de un mes que le vengo siguiendo los pasos a este avión. El PT-MUA es el primer Boeing 777-300 entregado a TAM (B777-32W/ER cn 37664) de ocho que ha comprado y causó mucho revuelo entre nosotros los "spotters" cuando se anunció que en una primera etapa volaría a SCL desde GRU.

En el intertanto he visto algunos fotos del avión mientras está en la fábrica de Seattle y la verdad es que se ve muy bonito. Muchos lectores antiguos de este blog (yo se que hay algunos lectores fieles ) sabrán que para mi el "El Precioso" es un avión especial.

El delivery estaba contemplado para fines de julio y en los primeros días de agosto debería realizar su primer vuelo a SCL. Sin embargo, algunos problemas con los interiores del avión postergaron su entrega hasta el 18 de agosto, día en que supe que ya había llegado a Sao Paulo. Phillipe, un amigo brasileño de muchos contactos en el medio, me envió hace poco fotos del interior del avión y la verdad es que como buen avión nuevo se ve impecable.

Desde el mismo día 18 me pongo en alerta y cargo mi cámara hacia todos lados desde entonces. La primera alerta llega la semana pasada cuando la empresa que lo atiende en SCL está avisada que el avión puede ser el tradicional A330 o bien el nuevo B777. Parto al aeropuerto el día señalado, coincido con Mauricio y luego de una breve espera vemos que el avión que llega es el A330. Desilusión. Sin embargo, la pena se olvidó ese día haciendo un paseo por la loza del aeropuerto en una historia que está en preparación. Por supuesto un paseo que fue gentileza de mi buen amigo Alfredo.

Esta mañana sigo cargando mi cámara para todos lados y cuando me dispongo a enfrentar la jornada normal reviso mi correo un poco más tarde de lo acostumbrado y veo que tengo el aviso que esperaba.

"received from TAM's insiders

FROM 26/08/08 (INCLUDE) TO 19/09/08 :

- TAM-8026/DIÁRIO/ EQUIP 773/GRU 08:25 SCL 11:35
- TAM-8027/DIÁRIO/ EQUIP 773/SCL 12:55 GRU 17:30
OBS:
1) All times are expressed LOCAL TIME;
2) 77W = B777-300 (7F,56C,302Y);
"

Declaro emergencia y dispongo todo para partir, tengo suerte y parto para llegar un poco antes de las 12.

Ya estoy en el aeropuerto y si bien el día está despejado, se anuncia lluvia para hoy. Las nubes que veo avanzar desde el oeste hacia la cordillera, parecen dar sustento a los pronósticos. Falta más de una hora para que llegue el avión por lo que me ha dicho mi amigo Mauricio así que para evitar el acoso de los carabineros, que ya nos controlaron la semana pasada, me muevo entre Aldeasa y el umbral de la 17R atento a la radio. Mauricio me recuerda que la 17R está cerrada a esta hora durante toda la semana. Es decir, ningún avión saldrá o llegará por este lado.

Desde dónde estoy veo como avanzan las nubes y se me empieza a ir el sol.


También veo los tráficos que llegan por la pista 17L, y no me extraña nada en consideración de mi buena fortuna, que vea llegar el Cargolux con su B747-400, que se vaya el Air Canada con su livery de "Star Alliance" y que llegue el "Condor" de la Fach (B707). "No importa me digo", ni siquiera les tomo fotos desde donde estoy como haría normalmente pues la foto que me quiero llevar hoy es otra.

Sin embargo la llegada del 777 no es segura por lo que en mi fuero interno ruego porque me lleve la recompensa en remplazo de todos esos aviones interesantes que veo pasar a lo lejos.

A las 13 hrs. escucho una transmisión en inglés y distingo el código de vuelo del TAM. Está a 3 millas al este de UMKAL (punto de cruce de la cordillera) y de ser el 777 acaba de empezar su primer cruce de Los Andes. A las 13.13 está establecido en el localizador de la 17L y comienzo a moverme lentamente hacia Aldeasa que es dónde lo puedo pillar. A las 13.21 la torre lo autoriza a aterrizar y ya llegué a mi ubicación. Miro hacia la 17L, para ver por dónde aparecerá, y en mi campo visual se cruza la imagen de los autoextintores del SSEI ubicados a los costados de la calle de rodaje "Hotel" y me cae el tejo (me doy cuenta, comprendo o percibo) lo que es obvio: El avión que viene será recibido con un arco de agua.

Eso sólo lo hacen con aviones nuevos y especiales, por lo que ahora no me cabe duda de que el avión que está por aterrizar es el PT-MUA. Dicho y hecho, pasan un par de minutos y lo escucho aplicar reversores sin verlo hasta que aparece a lo lejos.

Es una visión Espectacular. No hay otra palabra para describirlo. El problema es que desde dónde estoy no tengo un buen ángulo para capturar el arco de agua así que miro para todos lados pensando sobre que subirme y lo único que veo es mi auto. Lo muevo desde dónde está y lo estaciono paralelo a "Hotel", saco un piso de goma, lo pongo sobre la parte más sólida del capót y me subo. "Aguanta no más le digo", "si te abollo mala suerte". Notó además que me falta costumbre para este tipo de emociones pues me tiemblan las manos... y la cámara.

Primera foto del PT-MUA en Chile. Perdón por el cable.


Desde ahí voy a ver mi primer arco de agua. El 777 taxea de vuelta por alfa y dobla a la izquierda por "Hotel".




Preparados...

Y comienza el arco de agua


Sin detenerse pasa entre los chorros de agua que acaban de empezar a arrojar los autoextintores y tomo todas las fotos que puedo.



Sigue avanzando por "Hotel" y se dirige directo hacia dónde estoy yo. Tomo fotos y tomo fotos y cuando se me viene encima y se ve tan grande que ya casi no me cabe en el cuadro, bajó la cámara miro a la cabina de los pilotos y los saludos. Mi alegría es total cuando veo que los tres que distingo me saludan de vuelta.


Pasa junto a mi y se ve más lindo que nunca. Los nuevos colores de TAM le quedan muy bien y a mi juicio luce más que el blanco liso del 777 de Air France que estamos acostumbrados a ver por SCL.



Dobla por "Quebec" y se dirige directo al Puente 15. Lo fotografío hasta que ya tiene el puente adosado e imagino a los afortunados pasajeros que viajaron en el primer vuelo comercial de este avión descendiendo con desgano de este avión espectacular. Digo con desgano puesto que si fuera yo no tendría en absoluto ganas de descender.




Misión cumplida. Me encantaría quedarme a verlo partir pero hay obligaciones y lo tarde que llegó atenta contra esas intenciones, así que lo miró por última vez y me voy feliz de vuelta a dónde se supone que debería estar.

Fue una expedición redonda. Lo capturé, vi mi primer arco de agua, me saludaron los pilotos y tomé las fotos que quise. No se puede pedir más. Bienvenido a Chile PT-MUA y que tengas una larga vida.

Más tarde subiría un par de fotos a jetphotos, que en este caso y por ser "hot", estuvieron la friolera de 6 y 25 minutos en la cola respectivamente.

http://www.jetphotos.net/viewphoto.php?id=6340468

http://www.jetphotos.net/viewphoto.php?id=6340521

Las fotos casi no han sido tocadas por lo que están casi como recién sacadas de la cámara.

domingo, agosto 03, 2008

Santiago Tower

Mucho tiempo ha pasado desde la última entrada a este blog pero eso no quiere decir que no haya ido al aeropuerto en todo este tiempo. Las condiciones climáticas han mejorado a ratos lo que significa que ha llovido y he podido aprovechar un par de días de aire limpio. Al mismo tiempo, desde que fuimos "presencias invisibles en el aeropuerto" repetimos otra visita nocturna a SCL que ya habrá tiempo de comentarles pero lo que me lleva a crear esta entrada es el recuerdo de la última visita nocturna al aeropuerto.

Es de noche y voy otra vez camino al aeropuerto. Las últimas veces que vine fue para ver salir al Boeing 767-300ER ex Lan CC-CCZ que pasó a ser operado por Aeroméxico y que fue un día de mucha neblina.



Y la siguiente ocasión es un día después de lluvia en que fuerzas poderosas me arrastraron al aeropuerto a disfrutar de un impecable día de sol y aire muy limpio.


Pero ahora es de noche y voy simplemente a visitar a mi amigo alfaromeo que está de turno y la noche después de un par de días de lluvia está bastante clara y no hace frío. Eso no impide que dada la experiencia, vista polera, camisa de franela, sweter, dos polar y parka. Parezco un oso y me cuesta moverme pero no está de más ser precavidos. El estanque de becina va a full.

Llego al aeropuerto y apenas me encuentro con alfredo me suelta un "esta noche vamos a tener una perspectiva diferente". Por un momento sospecho de que se trata pero no digo nada. Prefiero esperar a ver que sucede. De fondo veo como el segundo American está en plena carrera de despegue.

Nos embarcamos en la unidad y partimos, no a la plataforma en esta ocasión sino que nos dirigimos directamente a la construcción más alta de todo el aeropuerto y en cuyo piso superior funciona la Torre de Control del Aeropuerto Internacional de Santiago.


Tras un par de minutos de trayecto llegamos, nos bajamos y nos dirijimos con todo nuestro equipo fotográfico hacia la entrada. Luego de saludar por aquí y por allá subimos en un ascensor que nos deja a los pies de una escalera que no tardamos en comenzar a subir y que nos conduce directamente a las dependencias de la torre de control.

A primera vista impresiona lo que veo. Y con la segunda , tercera y cuarta visión sigo impresionado. Hay pantallas electronicas muy coloridas por doquier y si no entiendo su funcionamiento en un principio, eso no es problema pues luego de las presentaciones y saludos, la persona a cargo me hace una completa exposición de todo el funcionamiento del lugar.

Desde ya debo decir que lamentablemente no tomé ni una sola foto (del interior) por la sencilla razón que no quise ser invasivo ni patudo, y la verdad es que estaba tan interesado en todo lo que me explicaban que no lo consideré prioritario y menos me acordé del blog. Para la próxima sin duda que saco fotos.

En ese momento el equipo que conforma el turno de noche está encargado de la autorización de los vuelos, control terrestre y torre propiamente tal. Me muestran como es el trabajo y el apoyo que brindan las pantallas que en un comienzo no entendí. Me impresiona especialmente la pantalla donde se puede ver digitalmente cada rincón del aeropuerto. Se ven los aviones en las calles de rodaje y en las pistas; se ven también los diferentes vehículos que circulan por el interior y todo aquello que al parecer mida más de un metro. Esta pantalla es clave en condiciones de neblina cerrada como tan frecuente suele ser en este aeropuerto y responde a una eterna inquietud que tuve precisamente en días de niebla. Si el controlador autorizó el despegue del avión con esta neblina, ¿como sabe que mo hay un auto en la pista?.



Ahora ya lo se. Lo sabe porque con esta pantalla del radar lo ve todo. Literalmente nada se mueve por el interior del aeropuerto sin que ellos lo sepan.

En otra pantalla se ven los vuelos que están tanto en aproximación al aeropuerto como alejándose de él, y con un simple movimiento del "mouse" se pueden ver todos los vuelos que en este momento se encuentran en el espacio áereo chileno: desde Arica a Magallanes. Me fijo en la pantalla y veo sobre el mar a la altura de Antofagasta una fila india de aviones con rumbo norte entre los que diviso un American, el Delta y el segundo American que vi despegando cuando llegué. Increíble.

En otra pantalla se despliega toda la climatología, con gráficas de la presión, de la dirección del viento, su velocidad y el Metar. En la sección superior se ve una gráfica de la 17L con los alcances visuales en la zona de contacto, en el centro y en el roll out.

Por supuesto que toda esta tecnología electrónica tiene el respaldo de los aparatos convencionales que siempre están ahí en caso de necesidad.

La conversación se prolonga y yo entretenido como nunca miro todo, pregunto y complemento lo que había intuído ya cada vez que escucho las conversaciones por el scanner desde afuera. Claro que en esta oportunidad estoy al lado de la controladora que gentilmente me hace una demostración de todo. El funcionamiento de todo es impecable. En mi próximo vuelo tendré más que claro que mi permanencia a bordo del avión será plácida y segura gracias al trabajo profesional de estas personas. Ello junto a los atentos "vigilantes del nido" permitirán que yo disrute de mi bebida a bordo sin sobresaltos :-))

Hasta ahí todo bien.

El problema comienza cuando nos invitan luego a salir a la "terraza" que rodea la construcción y que se ve justo debajo de los ventanales en la primera foto. ¿dije ya que estamos a una altura de unos 10 pisos más o menos?. La salida no es cómoda y se hace a través de una especie de escotilla. Pasamos nosotros y las cámaras, pongo un pie afuera y recuerdo algo que ya sabía: el piso es de reja y se puede ver entre los huequitos. Miro hacia mis pies y veo que estoy parado directamente sobre el vacío. En ese momento recuerdo que tengo vértigo, pero me armo de valor y me paro sobre esa reja sin perder la dignidad. Como perro en bote me siento en uno de los tres peldaños de una escalerita que hay y me quedo tranquilo y muy quieto mirando para todos lados. Mi amigo se entretiene mientras instalando su trípode y saca fotos. Yo miro no más. Tengo la cámara colgada al cuello pero no puedo tomarla porque las manos las tengo firmemente sujetas en las barandas y no quieren soltarse por ahora. Después de unos minutos me siento más cómodo y comienzo a sacar algunas fotos pero no me da el ánimo para armar el trípode, lo que en todo caso me da lo mismo pues digamos que prefiero disfrutar de la vista que es sencillamente espectacular.




A ratos me paro y me hago el osado pero mi valor dura justo hasta donde se acaba la baranda. Hasta ahí no más llego yo. Transcurre un buen rato que estamos ahí y finalmente me canso de mi hazaña de haber estado ahí afuera sobre el vacío y nos vamos a continuar con el paseo. Entramos, nos despedimos y ha sido una visita muy interesante, con gente muy simpática y profesional.

Cuando finalmente volvemos a tierra firme (¿se vería mal si beso el suelo?), nos vamos de paseo por la plataforma nacional que está casi vacía pues está el Copa y un par de Sky's y.


Luego nos dirigimos por Alfa rumbo al punto de espera de la 17L. Somos seguidos por un A340 de Lan, CC-CQF. Está llegando la neblina y vemos como se dirige hacia nosotros el gigante con todas sus luces encendidas. Gentilmente las apaga y se puede tomar una foto.



Instalo el trípode y me entretengo tomándole fotos desde la oscuridad que en realidad son fotos para el recuerdo por que no hay mucha luz en esta parte. el A340 se queda en el punto de espera porque viene un tráfico en final corto a la 17L así que seteo para 10 segundos de exposición a ver que sale. Disparo y dos segundos después pasa un "chancho" que deja este bonito efecto en la foto.


Seguimos hacia otro sector del aeropuerto y vemos durmiendo plácidamente a los tres B732 de Air Comet que tienen la nueva pintura de la compañía.



El sector de mantto de Lan luce muy iluminado y tranquilo. La mayoría de los Bebés (A318) de mi amigo "SoyAlex" están ahí en ese momento descansando. Mi amigo también a esta altura descansa "vientre" al sol en una playa europea.


Y así se acaba el paseo pues tenemos que ir revisar las propiedades de la nueva cámara de mi amigo y a tomar un café con los "vigilantes del nido", que por muy tarde que sea están ahí bien despiertos y alertas. Más aún ahora que llegó la neblina y que las condiciones de visibilidad se vuelven críticas. Al rato y antes que la neblina empeore me retiro y en el camino perimetral cruzo bancos de niebla que por momentos me ciegan. Me acuerdo de la gente de la torre y no me preocupo porque ellos a diferencia de mi lo pueden ver todo aún con niebla.


Saludos!